La persona en el centro:  un confinamiento que no nos ha parado

La persona en el centro:  un confinamiento que no nos ha parado

El día 13 de marzo empezó un periodo muy complicado para todo el mundo. Fue el inicio de un confinamiento que no nos hubiéramos imaginado nunca. Empresas, entidades y personas nos tuvimos que adaptar a una nueva situación nunca vivida. Tenía que ser una adaptación rápida si queríamos sobrevivir, tanto por parte de las entidades, empresas como de las personas. Durante los días previos evaluamos todos los riesgos y fuimos preparando un confinamiento seguro por las personas: nuestros usuarios/se y técnicos/as. Y teníamos muy claro que nuestro lema seria:

#ElConfinamentNoEnsAtura

Han pasado cuatro meses y nosotros, como entidad, queremos hacer balance de este tiempo de confinamiento y ver si nos paró o no. Nos hemos adaptado a la nueva situación? Esta adaptación ha estado fácil, rápida, ha estado efectiva?

Si algo ha supuesto este confinamiento por la entidad ha sido uno no parar de acciones y “momentos del último minuto” y de “no parar”; incluso ahora, todavía nos cuesta sacar un momento para parar y hacer este balance de la situación vivida, pero si queremos aprender y mejorar es necesario.

Es necesario parar, hacer balance y mejorar.

Uno de los resultados más positivos y que hay que destacar es la cantidad de horas destinadas a las personas beneficiarias de nuestros programas. A pesar de no poder hacer atención presencial, no nos hemos quedado atrás. Nos hemos reinventado para estar junto a la persona. Además de realizar llamadas telefónicas, hemos querido ofrecer un servicio el más próximo posible, así que tuvimos que probar varias formas y aplicaciones hasta encontrar la más adecuada por cada uno/a de nuestros beneficiarios/se para hacer videollamadas y videoconferencias grupales.

Durante estos 4 meses hemos destinado mas de 1.000 horas a atender las necesidades de estas personas, de manera individual o colectiva. Ya fuera para apoyar emocional, ofrecer apoyo para realizar trámites relacionados con ayudas económicas, subvenciones, etc. o para dar acompañamiento en la investigación de trabajo.

También queremos destacar el compromiso social que ha movido Andròmines verso los colectivos más desfavorecidos y más afectados por la pandemia. Viendo las dificultades económicas en las cuales se han encontrado muchas de las familias vinculadas con la entidad, hemos podido repartir alrededor de 2.400 kg de alimentos, aportando comida fresca (frutas, verduras y hortalizas) y congelados a 24 familias.

También requiere una mención especial el n.º de inserciones conseguidas a lo largo de estos 4 meses. Han sido un total de 27 inserciones. Teniendo en cuenta que la tasa de paro no hace más que subir, que los procesos de selección se han realizado on-line (con la dificultad que representa la rendija digital existente en el colectivo que atendemos), además del estado de alerta existente que creaba miedo y desconcierto…. conseguir 27 inserciones lo vivimos como todo un logro!. Y todo esto no habría estado posible si nuestro equipo de prospección no hubiera contactado con más de 200 empresas y gestionado un total de 52 ofertas de trabajo. 

Formación como inversión de futuro.

Somos un centro de formación, donde realizamos formaciones profesionalizadoras específicas. También ofrecemos pequeñas píldoras para mejorar las competencias y aumentar las posibilidades de inserción. Estas actividades se vieron interrumpidas con la aparición de la COVID19. Rápidamente nos pusimos a trabajar para no dejar de ofrecer este servicio y actualmente estamos realizando 2 formaciones por internet y hemos retomado las píldoras. Esta situación nos ha dado la oportunidad de mejorar la oferta formativa y adaptarnos y sobre todo acompañar a nuestro alumnado en una transformación tecnológica imprescindible en 2020.

Viendo todos estos resultados podemos decir que el balance es muy positivo como entidad. A pesar de que ha sido un proceso complicado, hemos conseguido adaptarnos a la nueva situación, hemos aprendido a utilizar y acompañar en las nuevas tecnologías y hemos conseguido, ante la necesidad, que los/las nuestros beneficiarios/se  puedan hacer un uso aceptable, algo impensable hace cuatro meses.

Ante las dificultades iniciales, nos hemos reinventado, nos hemos sobrepuesto y hemos sabido realizar nuestro trabajo todo lo bien que siempre, ofreciendo un servicio excelente y donde las personas que participan de los programas sociales de Andròmines han salido beneficiadas.

Pero no lo hemos hecho solas!!!!

No sería justo decir que lo hemos hecho solas, porque sin el apoyo económico, tecnológico y de equipo  con Entidades de todo el territorio, Administraciones y personas a título individual no hubiera sido posible.  Gracias a todas ellas, a pesar de que nos es imposible de nombrarlas una por una, pero sí que nos deja tarea para seguir visibilizando experiencias que han servido para seguir adelante con nuestros programas activos actuales:

 

Unas gracias infinitas a la espera de poder dotarlas del agradecimiento público qué se merecen.

Un camino difícil

Aun así somos conscientes que nos queda mucho trabajo, desgraciadamente la situación social y laboral de nuestro país cada día es más complicada. Las familias y personas que atendemos realmente necesitan nuestro acompañamiento y de todo un tercer sector empoderado y que demuestra día a día que sabe reinventarse. Nosotros estamos dispuestas a seguir reinventándonos y llegar al máximo de personas posibles.

Ahora reclamamos que las Administraciones doten de todos el recursos necesarios los diferentes programas sociales; no con los recursos habituales, que ya no serán suficientes, sino que se tienen que aumentar recursos y la respuesta tiene que ser clara: rescatar personas y que todo el mundo pueda superar los efectos de la crisis social, económica y sanitaria. Solo con el esfuerzo de todas haremos que las situaciones límite habituales y sobrevenidas dejen de serlo y así ejercemos todos y todas el derecho en una vida digna!!!

Gracias para acompañarnos!!!!

Acción social

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